Pizza Margherita
- Medio
- 1 h 27 min
La pizza marinara es una típica pizza napolitana realizada solo con tomate fresco, aceite, ajo y orégano colocados sobre una fina capa de masa. Esta pizza es la más famosa junto con la margherita: su nombre proviene del hecho de que los ingredientes, fáciles de conservar, podían ser llevados por los marineros para condimentar el pan durante sus largos viajes... los mismos ingredientes que encontramos en otros platos humildes de nuestra tradición, como por ejemplo la carne a la pizzaiola. A pesar de la sencillez de la preparación, sin embargo, ¡la pizza marinara tiene un sabor inolvidable!
Dependiendo del tiempo disponible, podéis decidir experimentar con la masa de la pizza de larga fermentación, o al contrario, con bicarbonato.
Para los condimentos, podéis dejar volar la imaginación o escoger entre:
Para preparar la pizza marinara, comenzad vertiendo la harina en el bol de la batidora 1. Agregad la levadura 2 y 100 gramos de agua, luego poned en marcha la batidora con el gancho montado a velocidad media-baja 3.
Proceded añadiendo el agua poco a poco, asegurándoos de esperar a que la dosis anterior haya sido bien absorbida por la harina 4. Una vez vertidos aproximadamente los 3/4 del agua, añadid la sal 5 y continuad amasando. Agregad el resto del agua siempre en hilo y dejad trabajar hasta obtener una mezcla lisa y homogénea 6.
En este punto, añadid el aceite gradualmente (como hicisteis con el agua) 7. Cuando el aceite se haya absorbido completamente, extraed la masa de la batidora y modeladla con las manos hasta obtener una bola 8. Colocadla en un bol grande ligeramente aceitado 9.
Cubrid con film o con un paño limpio y dejad que leve en el horno con la luz encendida 10. Esperad a que la masa haya al menos duplicado su volumen (1,5 h), mejor si ha triplicado (2,5/3 h) y proceded a extender las pizzas 11. Una vez que la masa haya leudado, trasladadla a la superficie de trabajo y divididla en 4 partes iguales 12.
Haced una bola con cada una 13. Cubrid con un paño limpio y dejad reposar por 30 minutos 14. Aceitad ligeramente con un chorrito de aceite 4 bandejas de pizza de 30 cm de diámetro. Colocad en el centro de la bandeja una bola de masa 15.
y comenzad a aplastar desde el centro hacia el exterior, estirando ligeramente los lados si es necesario 16. Si la masa resulta demasiado elástica y tiende a volver a su forma anterior, dejad la pizza que estáis estirando y proceded a estirar otra, dejando reposar la anterior. Intentad extender la masa sobre toda la superficie de la bandeja 17. Aparte, en un bol grande, verted la salsa de tomate y condidla con sal, aceite, pimienta y orégano 18.
Verted un cucharón abundante de salsa de tomate sobre la base de la pizza 19 y extendidla con un movimiento circular, cubriendo casi toda el área, dejando solo un borde de aproximadamente 1,5 cm 20. Pelad el ajo y cortadlo por la mitad. Retirad el germen y cortad en rodajas finas 21.
Condimentad ahora con el orégano 22, un chorrito de aceite y el ajo 23. Dejad reposar la pizza con el relleno durante unos diez minutos, luego hornead a 210°C durante 15/20 minutos en horno estático (alternativamente, a 190°C en horno ventilado bastarán 15 minutos) 24. Tan pronto como saquéis la pizza marinara del horno, ¡podéis servirla bien caliente!