Rollos de canela
- Medio
- 1 h 20 min
¿Ganas de algo rústico y sabroso, para disfrutar en compañía frente a una pinta de cerveza recién servida?
¿Qué tal un buen trozo de nuestra focaccia rellena de col y speck? ¡Masa levada suave, rellena con col cocida en sartén y tiritas de speck!
Esta focaccia deliciosa está hecha con una masa de harina y agua enriquecida con mantequilla y aceite, ingredientes que la hacen particularmente suave, ideal para ser utilizada como base para focaccias rellenas.
La combinación de la col con la nota ahumada del speck, además, es muy sabrosa y recuerda un poco los aromas de las cervecerías alemanas... ¡pruébala también en la receta de pasta col y panceta!
¡La focaccia rellena de col y speck es un plato rústico y lleno de sabor al que no podrás resistir!
Para preparar la focaccia rellena de col y speck, primero prepara la masa: disuelve la levadura (alternativamente puedes usar 12 g de levadura fresca) y el azúcar en el agua tibia 1; disuelve la sal en la leche 2. En un bol, coloca la harina tamizada y comienza a verter poco a poco el agua con la levadura y el azúcar 3 y
la leche con la sal 4. Recoge bien los ingredientes con las yemas de los dedos 5 y añade la mantequilla ablandada en trozos y el aceite de oliva virgen extra 6.
Amasa con las manos hasta que los ingredientes estén bien integrados 7, luego transfiere la masa a una superficie ligeramente enharinada y continúa trabajando con las manos 8 hasta obtener una masa suave, homogénea y lisa. Puedes realizar estas operaciones con una batidora recogiendo primero los ingredientes a velocidad media con la paleta y luego continuando amasando con el gancho. Forma una bola, colócala en un bol, cúbrela con film y déjala reposar a temperatura ambiente (por un par de horas, o hasta que haya duplicado su volumen) 9.
Mientras tanto, prepara el relleno: limpia la col (consulta nuestra Escuela de Cocina: Cómo limpiar coles y coliflores), cortándola a la mitad 10 y eliminando la parte dura central, y córtala en tiritas finas 11. Corta también el speck en dados o tiras 12, según prefieras.
Cocina la col en una sartén amplia con un hilo de aceite 13. Poco a poco añade el caldo 14, sala, añade pimienta, cubre con una tapa y cocina durante unos 20 minutos, removiendo de vez en cuando 15.
Cuando la col esté bien suave, apaga el fuego y añade el speck 16 y el queso rallado, que dará sabor 17. Mientras tanto, la masa estará bien inflada y leudada 18.
Divide la masa por la mitad 19 y aceita bien una bandeja rectangular de dimensiones 40x30 cm 20. Extiende delicadamente con el rodillo una parte de la masa, hasta obtener una lámina de aproximadamente medio cm de grosor 21.
Forra la bandeja con la masa extendida, haciéndola adherir bien también en los bordes 22. Pincha el fondo con los dientes de un tenedor 23 y rellena con el relleno de col y speck, que extenderás uniformemente por toda la superficie 24.
Extiende con el rodillo el trozo de masa restante siempre en una lámina de aproximadamente medio cm y cubre con él la focaccia 25. Presiona los bordes para hacer que se peguen las dos láminas 26, doblando los bordes hacia adentro y aplastándolos para fijarlos con los dientes de un tenedor 27.
Cubre la bandeja con film y deja reposar la focaccia una hora más 29 a temperatura ambiente. Cuando la focaccia esté bien inflada, pincela la superficie con un huevo batido 30.
Pincha con los dientes de un tenedor 31, empuja de nuevo hacia adentro la masa de los bordes 32 y hornea la focaccia en horno estático ya caliente a 180° durante 45 minutos (si es ventilado, 160° durante 40 minutos). Cuando la superficie esté bien dorada 33, saca la focaccia del horno y déjala enfriar un poco. ¡Aquí está lista tu focaccia rellena de col y speck!