Angélica con calabacines

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PRESENTACIÓN

La angélica con calabacines es un pan salado suave y espectacular que se inspira en la receta clásica de la tarta angélica, rica en gotas de chocolate y cubierta con un dulce glaseado. En esta versión salada, en lugar de chocolate encontramos tiernos calabacines, un sabroso queso caciocavallo y crujientes hojuelas de almendra tostada. La técnica para hacerla y el trenzado final se mantienen sin cambios, de hecho, obtendréis el mismo efecto espectacular... ¡una tarta salada que entra por los ojos! La angélica con calabacines es perfecta para servir como aperitivo, colocándola en el centro de la mesa, o para llevar en una excursión: de hecho, es excelente tanto caliente como a temperatura ambiente. ¡Pruébala también en versión mini o con cerveza!

¡Descubre también nuestro wool roll bread, el pan ovillo, relleno de queso!

INGREDIENTES

Ingredientes para el prefermento
Harina Manitoba 185 g
Agua 100 g
Levadura fresca de cerveza 10 g
para la masa
Harina 00 400 g
Leche entera 125 g - a temperatura ambiente
Mantequilla 100 g - blando
Sal fina 15 g
Azúcar 10 g
para el relleno
Calabacines 500 g
Queso caciocavallo 150 g
Almendras en láminas 100 g
Chalote 1
Tomillo 1 ramita
Aceite de oliva virgen extra cantidad suficiente
Sal fina cantidad suficiente
Pimienta negra cantidad suficiente
para pincelar
Agua 30 g
Aceite de oliva virgen extra 30 g

Preparación

Para preparar la angélica con calabacines, como primera cosa, realiza el prefermento: disuelve la levadura en el agua 1, transfiérelo a un bol donde ya habrás vertido la harina 2 y comienza a amasar con las manos 3.

Transfiere la mezcla a una superficie de trabajo, dale una forma esférica 4 y colócala nuevamente dentro del bol. Cubre con film transparente 5 y deja fermentar durante una hora a una temperatura de 26°C o en el horno apagado con la luz encendida. Una vez que haya duplicado su volumen 6, podrás preparar la masa.

En el bol de una batidora planetaria equipada con gancho, vierte la harina y la leche 7, luego añade el azúcar 8 y el prefermento 9 y comienza a amasar todo.

Tan pronto como obtengas una masa homogénea, comienza a añadir la mantequilla blanda, un trozo a la vez 10. Trabaja hasta completa absorción 11, luego añade también la sal. Transfiere la masa a una superficie de trabajo y amásala durante unos segundos con las manos, luego forma una bola 12

y colócala dentro de un bol. Cubre con film transparente 13 y deja fermentar durante 2 horas, a temperatura ambiente o en el horno apagado con la luz encendida. Mientras tanto, prepara el relleno: pela la chalota y córtala en rodajas 14. Corta los extremos de los calabacines y córtalos primero a la mitad a lo largo 15

y luego en rodajas 16, de modo que obtengas medias lunas. En una sartén, vierte un poco de aceite, añade la chalota y deja que se ablande. Luego añade los calabacines 17 y sazona con sal y pimienta 18.

Añade el tomillo y cocina durante unos 10 minutos 19. Mientras tanto, ralla el caciocavallo 20 y tuesta las hojuelas de almendra en una sartén 21.

Tan pronto como la masa haya fermentado 22, transfiérela a la superficie de trabajo 23 y extiéndela con un rodillo hasta obtener un rectángulo de 50x35 cm y un grosor de unos 4 mm 24.

Cubre toda la superficie con los calabacines, el caciocavallo rallado 25 y las hojuelas de almendra 26. Enrolla comenzando por el lado largo 27, teniendo cuidado de no dejar salir el relleno. Sella bien los bordes y deja reposar en el frigorífico durante 30 minutos.

Luego, retoma el rollo 28, divídelo a la mitad a lo largo, haciendo un corte de un extremo al otro con un cuchillo afilado 29. Pellizca las dos partes obtenidas en uno de los extremos para unirlas 30,

luego trenza los dos rollos manteniendo la parte cortada hacia arriba para que el relleno sea visible 31. Finalmente, une los dos extremos para formar una corona 32, que transferirás delicadamente a una bandeja forrada con papel de hornear. Emulsiona agua y aceite con un batidor 33

y pincela la superficie de la angélica 34. Hornea en un horno estático precalentado a 180°C durante 60 minutos en la rejilla más baja, colocando otra bandeja encima para que no se dore demasiado. Saca del horno 35 y deja que tu angélica con calabacines se enfríe antes de servirla 36.

Conservación

La angélica con calabacines se conserva durante 1-2 días máximo a temperatura ambiente cubierta con una campana o film transparente. Si prefieres, puedes calentarla antes de servirla. Es posible congelarla después de haberla cocido y enfriado completamente.

Consejo

¡Es posible utilizar también otros tipos de quesos o añadir cubitos de panceta o jamón cocido!

Para la traducción de algunos textos, se pueden haber utilizado herramientas de inteligencia artificial.