Crepe con Nutella
- Fácil
- 40 min
- Kcal 301.99
La bechamel es una salsa base de las más versátiles en la cocina: fácil y rápida de hacer, es perfecta para dar un toque extra a muchos platos diferentes, desde las lasañas hasta la pasta al horno, como la pasta gratinada con hinojos, por ejemplo, hasta incluso los espinacas o el pechuga de pollo. Su paternidad es reclamada tanto por los franceses como por los italianos. La hipótesis más aceptada es que fue Catalina de Médici quien la introdujo en Francia con el nombre que tenía entonces, es decir, “salsa pegamento”. Pero fue gracias al cortesano Louis de Béchameil que luego tomó el nombre de salsa bechamel, aunque Pellegrino Artusi prefirió italianizarla en su recetario con el nombre de “balsamella”, ahora en desuso. Descubre todos los secretos para obtener una bechamel perfecta hecha en casa, cremosa y sin grumos, y apostamos a que nunca más recurrirás a la envasada.
Prueba también estas variantes:
Para preparar la bechamel, primero vierte la leche en un cazo 1, añade la nuez moscada 2 y la sal 3, y caliéntalo.
Pon la mantequilla en otro cazo 4 y derrítela a fuego lento, luego añade la harina de una sola vez 5. Mezcla vigorosamente con una varilla para evitar la formación de grumos 6.
Sigue mezclando hasta obtener una mezcla dorada, el roux 7. En este punto, diluye el roux añadiendo primero un poco de leche caliente y luego el resto 8. Sigue mezclando a fuego lento hasta alcanzar la consistencia deseada 9; cocinando la bechamel durante 5-6 minutos obtendrás una densidad media. ¡Tu bechamel está lista para ser utilizada!